Y me pregunto si es la soledad o la necesidad de comunicación o un juego lo que provoca tal situación. Soy un alma condenada a vivir entre esperanzas varias. El amor me ha besado dos veces de forma imposible. No sé bien si olvidar de una vez o intentarlo de nuevo, sólo sé que deseo querer y sentirme querida. Si lo ves algún día pasar cuentale que lo quiero, bésalo de mi parte y dile que sigo esperando. Que recuerdo la brisa del cielo en el mar de su boca y percibo el aullido del mar en su pecho callado.