Detrás de todo este espectáculo de palabras, tiembla indeciblemente la esperanza de que me leas,
de que no haya muerto del todo en tu memoria...

diciembre 14, 2010


Pasaron años antes de entender que ambos habían sido injustamente castigados. Lea, por haber nacido tantos años antes que él, y Chéri por no comprender que Lea era la única mujer que podía amar. En cuanto había aceptado que era así, se pegó un tiro en la cabeza.
Esto siento, más o menos, y por esto mismo muero.