Necesito un hombro en el cual apoyarme, no un "profesor" que me quiera enseñar.
Necesito una mano que acaricie mi espalda, no que me digan lo que tengo que hacer.
Necesito un beso y un abrazo, no que me digan que el problema soy yo.
Necesito que alguien haga las cosas a mí manera cuando de mí se trata, y no como quieran.
Necesito que me digan que todo va a estar bien, y no que se vayan por la primer salida.
Necesito palabras tiernas, no técnicas.
Necesito un humano al lado mío, no un robot.
Necesito un novio, no un psicólogo.
Cuando tenés todo lo que querés , pero no lo que necesitas...
¿Podría ser peor?