A partir de ahora voy a hacer lo que sé hacer mejor: Fingir.
Fingir que todo está perfecto. Poner una sonrisa aunque por dentro mi corazón haya estallado en miles de pedazos. Hacer de cuenta que soy feliz y más fuerte que nadie, demostrárselo al mundo, cuando en realidad soy la persona más infeliz y miserable. Decir que estoy bien, cuando quiero estar en otro lado, muy lejos. Fingir que somos dos contra el mundo, cuando estoy yo sola, siempre fue así. Fingir, para sobrevivir. Eso. Mentirme tanto hasta llegar a creer que es verdad.