
Hay etiquetas que es mejor dejarlas en el armario. Cuando etiquetamos a la gente como novio, novia, marido, esposa, casado o soltero; olvidamos al ser humano que está detrás de esa etiqueta. Hay quienes están vestidas de pies a cabeza con puro amor. Y ésa es la única etiqueta que nunca pasa de moda.