Detrás de todo este espectáculo de palabras, tiembla indeciblemente la esperanza de que me leas,
de que no haya muerto del todo en tu memoria...

octubre 22, 2009

17:23

Hora de la merienda con mi papá, charlando por fin sin caras de culo. Entre tantas cosas le conté que aburrida en el colegio me puse a copiar su firma ya que se parece mucho a la mía. Y me salió igual. Él me dijo que ya van 24 años que falleció mi abuela y todavía puede hacer la firma idéntica a la de su mamá. También me tiró esta frase: "Las personas mueren cuando uno las olvida". Y ese fue su pie para retirarse. Me quedé sin palabras, cosa que pocas veces sucede.
Adiós.
Esto siento, más o menos, y por esto mismo muero.