Si tú te atreves por mi vida que te sigo, si tú me olvidas, te prometo que te olvido, después de todo sólo queda un sueño roto y evitamos mil heridas que jamás podrían cerrar. Si tú te atreves, yo renuncio al paraíso. Amar contigo, a soñarte a que me sueñes. Y al fin y al cabo más que a nadie nos amamos, son pasiones ya tan fuertes, que lo nuestro hay que olvidarlo… Si tú te atreves.