Detrás de todo este espectáculo de palabras, tiembla indeciblemente la esperanza de que me leas,
de que no haya muerto del todo en tu memoria...

febrero 03, 2012

La confusión había cesado y me sentía afortunada y tranquila 
de saber, por fin, que el tesoro está conmigo, 
que siempre lo estuvo y que es imposible perderlo.
Esto siento, más o menos, y por esto mismo muero.