Sólo encuentra razones para dejarme. No hay una razón válida para quedarse conmigo. Entonces ¿Por qué sigue acá? Porque el único motivo no es una razón. Es, más bien, algo que sentimos. Para que un sueño se haga realidad, hay que saber esperar, reflexionar, tener paciencia. Algo de lo que yo carezco. Cuando sé, que si llegara a cumplirse, sólo sería un sueño momentáneo. Sé como va a terminar y sin embargo, quiero volver a intentarlo. Pero advierto que no voy a esperar toda la vida, no voy a volver a desperdiciar oportunidades.